Crece la presión de las regiones para que Conte acelere la salida de la cuarentena
El país consolidó una vez más la tendencia a la baja en la cantidad de personas infectadas por coronavirus. En medio de ese panorama, el gobierno fue eje de las críticas de opositores, de la Iglesia y hasta de la propia coalición oficialista.
Mientras los gobiernos regionales continúan desafiando al primer ministro Giuseppe Conte con las medidas de flexibilización de la cuarentena, Italia anunció este viernes 269 muertos por coronavirus en las últimas 24 horas, con un total de 28.236 desde iniciada la pandemia.
Pese a tener aún 100.943 casos activos, el país consolidó una vez más la tendencia a la baja en la cantidad de personas infectadas, de las internadas y volvió a registrar más casos de curados (2.304) que de nuevos contagios (1.965), según informó Protección Civil en su boletín diario.
Los números se conocieron en medio de otro día de convulsionado panorama político para el Gobierno, eje de las críticas opositores, de los gobiernos regionales, de la Iglesia y hasta de la propia coalición oficialista en los últimos días.
A las tensiones políticas se suman crecientes penurias económicas provocadas por el coronavirus, luego de que el organismo de estadísticas nacional informara el jueves que Italia entró en recesión técnica tras una pasmosa caída del 4,7% de su PBI durante el primer trimestre de 2020.
Los ejes de conflicto
Este viernes fueron los responsables de producción de 30 ciudades de todo el país, entre ellas Pisa, Palermo, Génova y Monza, quienes le pidieron a Conte que acelere la salida de la cuarentena porque "hay actividades que no pueden soportar más un período de cierre tan prolongado", según informó el diario La República.
Otro foco de conflicto para Conte, el de la rebelión de los gobiernos locales, volvió a aumentar este viernes con la decisión de la presidenta de la sureña región de Calabria de no dar marcha atrás con la flexibilización para bares y restaurantes, en medio de la cuarentena por el coronavirus, pese a las críticas y a las advertencias de sanciones del primer ministro.
"Obviamente no voy a retirar la ordenanza", planteó Jole Santelli en declaraciones radiales, luego de que el jueves Conte calificara como "inaceptables" las propuestas de algunas regiones para flexibilizar antes de tiempo la cuarentena.
Santelli dispuso que, desde el jueves, los bares y restaurantes de la región sureña puedan abrir al público con mesas al aire libre, mientras que Conte decretó a nivel nacional que recién puedan hacerlo desde el 1 de junio.
"Conte permitió que los restaurantes abran para entregar a domicilio y para retirar. Yo solo agregué la posibilidad de alguna mesa afuera, que no me parece un escándalo", planteó la jefa de gobierno calabresa.
"Levantamos la medida como un acto de respeto a los trabajadores parlamentarios. Pero volveremos si no llegan hechos concretos del gobierno"; advirtió Salvini en declaraciones televisivas.
La flexibilización de la cuarentena dispuesta por Conte a partir del 4 de mayo permite que desde el lunes los bares y restaurantes abran con la modalidad de entrega a domicilio y retiro en el local, pero recién podrán iniciar el trabajo con mesas el 1 de junio.
El decreto de Conte para la salida gradual de la cuarentena recibió múltiples críticas, tanto de las regiones del Norte, que reclaman una salida más rápida de las restricciones, como de las del Sur, donde hay menos casos de coronavirus y temen una llegada masiva de infectados desde el Norte.
Santelli, que pertenece al partido Fuerza Italia, del ex primer ministro Silvio Berlusconi, recibió este viernes el apoyo del líder derechista Matteo Salvini, quien en declaraciones televisivas se mostró "de acuerdo" con la flexibilización en Calabria.
"Si en Calabria por varios motivos hay pocos contagiados, no veo por qué, con prudencia e inteligencia, no se pueda tomar un café al aire libre"; planteó Salvini.
De todos modos, y luego de 48 horas de duras críticas a Conte por su plan de flexibilización de la cuarentena, la Liga, el partido de Salvini, levantó este viernes la ocupación del Parlamento luego de que más de 70 legisladores durmieran dos noches seguidas en la Cámara de Diputados y en el Senado.